El maestro Edwin Mancha Abregú es un joyero de amplia trayectoria que pertenece a la tercera generación de una familia de plateros. Aprendió de su padre las técnicas tradicionales del repujado y el cincelado en plata, y posteriormente se capacitó en el Senati de la ciudad de Junín, donde fortaleció sus conocimientos técnicos y creativos.
Su propuesta se distingue por la incorporación de materiales poco comunes en la platería, como el cuero, el cacho de toro y otros insumos, que se combinan con la plata para dar origen a piezas innovadoras y originales. Este sello particular le ha permitido consolidar un estilo propio, reconocido dentro y fuera de su región, que combina tradición e innovación de manera equilibrada.
Con más de veinte años de experiencia, Edwin ha logrado posicionar su taller Qullqi Maki como un espacio de creación que mantiene vivo el legado familiar. Comercializa sus productos en ferias locales y regionales, así como en su propio local comercial, donde su obra es apreciada por un público diverso. Su trayectoria refleja cómo la joyería peruana puede adaptarse a los nuevos tiempos sin perder su raíz cultural y al mismo tiempo proyectarse hacia el futuro.

